11 Alfredo Pallardó y Bestard de la Torre (1855-1929), impresor de oficio, se inició en el oficio periodístico en Madrid, después de viajar por Europa y América. En 1905 fija su residencia en Barcelona, donde funda la revista Juventud Ilustrada, para incorporarse más tarde a la redacción de Las Noticias, cuyo «Suplemento Femenino» dirigió hasta su muerte. Escribió diversas obras teatrales, a veces con seudónimo, entre las que destacan Los misterios de Barcelona (1915) y Lo marit de la meva dona (1921).
12 Regina Opisso de Llorens (1879-1965) fue escritora, sobre todo, de novelas rosas y de adaptaciones juveniles de grandes clásicos, que firmó con diversos seudónimos: Teresa Guzmán, Diana Roldán, Rosa de Nancy, etcétera. Prolífica colaboradora de prensa, también completó una excelente traducción al castellano de Las mil y una noches. Era hermana del dibujante e historietista Ricardo Opisso, quien hiciera célebre su firma en el TBO. Sin duda fue también Regina Opisso quien incorporó a Ana María Martínez Sagi a la redacción de Mujeres, «revista de orientación femenina» fundada en 1927.
13 Para conocer mejor los avatares de esta institución pionera, recomendamos la lectura de El Club Femení i dEsports, plataforma dacció cultural, de Neus Real Mercadal (Publicacions de lAbadia de Montserrat, Barcelona, 1998).
14 Josefina Torrens (1902-2006) trabajó como delineante en Telefónica y destacó desde muy joven como nadadora. Fue campeona de Cataluña de los 400 metros libres. En 1932 ganó la Travessia del Port de Barcelona, siendo felicitada personalmente por Francesc Macià. En 1991 le fue concedida la medalla Forjadors de la Història Esportiva de Catalunya.
15 Enriqueta Sèculi (1897-1976) fue profesora del Instituto de Cultura y Biblioteca Popular de la Mujer, fundado por Francesc Bonnemaison. También participó en 1931 en la fundación de otra gran institución femenina catalana, el Lyceum Club de Barcelona, de la que llegaría a ser secretaria. Miembro del Front Únic Femení Esquerrista de Catalunya, se exilia en París tras la Guerra Civil, para instalarse después en Colombia, donde dirigirá la Escuela Normal de Señoritas de Medellín, después llamada Instituto Central Femenino.
16 Para una primera aproximación a la figura de la gran escritora Elisabeth Mulder recomendamos la lectura de nuestro prólogo a la edición de Sinfonía en rojo, aparecida en esta misma colección. Durante algunos años, Mulder firmó sus artículos con este seudónimo de Elena Mitre, tal vez por imposición de su marido.
17 Encontramos esta dura aseveración en un artículo aparecido en el semanario La Rambla, el 4 de enero de 1932, con el título «Reflexions del moment». Lo hemos incluido en nuestra selección.
18 Tomado de un artículo titulado muy expresivamente «La manca de companyonia entre les dones», publicado en La Rambla el 7 de enero de 1935. También los hemos incluido en nuestra selección.
19 19 Así hace, por ejemplo, en una conferencia pronunciada en la Agrupació de Cultura de la Dona de Vilafranca del Penedès, reseñada en La Rambla el 26 de abril de 1930.
20 20 Aunque Neus Real Mercadal atribuye el fichaje de Maria Teresa Vernet para el Club Femení i dEsports a las gestiones y desvelos de la también escritora Anna Murià, parece evidente que las muchas entrevistas que Ana María Martínez Sagi le hizo, así como los comentarios siempre elogiosos que hizo a su obra, tuvieron también que animarla a dar este paso. Ana María siempre me habló con simpatía de Vernet, con la que sin embargo nunca volvió a tener trato tras su vuelta del exilio. En cambio, guardaba muchas reticencias hacia Anna Murià.
21 Junto a Ana María Martínez Sagi suscribían el manifiesto Leonor Serrano, Teresa Torrens, Maria Teresa Vernet y Rosa Maria Arquimbau. El manifiesto, escrito en catalán, apareció publicado en La Nau, La Publicitat y La Rambla, todas ellas tribunas más o menos ligadas a Esquerra Republicana.
22 Así, por ejemplo, el artículo «A una senyora de laristocràcia madrilenya», publicado en La Rambla el 25 de mayo de 1931 y recogido en nuestra selección.
23 Las otras serán Anna Murià, Rosa Maria Arquimbau, Amanda Llebot y Maria Dolors Bargalló.
24 Rosa Maria Arquimbau (1908-1992), escritora barcelonesa, feminista y de ideas muy avanzadas. Destacan sus obras por su ironía corrosiva, que gusta de zaherir sin tapujos las hipocresías sociales. Entre sus títulos más destacados merecen recordarse La dona dels ulls que parlavem (1930) e Història duna noia i vint braçalets (1934). Como Ana María Martínez Sagi, fue una colaboradora destacada de La Rambla y participó en la constitución del Front Únic Femení Esquerrista; y como ella partió camino del exilio, aunque regresó a España mucho antes. Julià Guillamon, en su excelente Lenigma Arquimbau (Editorial Comanegra), nos ha dilucidado las vicisitudes biográficas y literarias de esta notable escritora.
25 Frente a los más de ciento sesenta que obtuvieron Murià y Arquimbau. De todo ello se nos informa en una gacetilla aparecida en La Vanguardia el 4 de junio de 1932.
26 Sara Insúa (1901-1985), hermana de Alberto Insúa, el célebre autor de El negro que tenía el alma blanca, escribió sobre todo cuentos y novelas, entre las que destacan La mujer que defendió su felicidad (1927), Salomé de hoy (1929), La señorita enciclopedia (1930) o Mala vida y buena muerte (1931). También tradujo diversas obras del francés bajo el seudónimo de Próspero Miranda. En el pórtico de Caminos calificaba la primera obra de Ana María Martínez Sagi de «libro impecable» y señalaba entre sus influencias las de Heine, Musset, Bécquer, Rosalía, Rubén y Nervo. Además, afirmaba que la autora era «un poeta moderno sin modernismos, femenino sin feminismos». Nuestra autora siempre agradeció enormemente estas muestras de generosidad.
27 Se refiere a Anette Kellerman (1887-1975), nadadora australiana que alcanzó gran fama por popularizar el traje de baño de una sola pieza y la natación sincronizada. Protagonista de películas muy populares en su época, como A Daughter of the Gods (1916), dirigida por Herbert Brenon (donde aparece desnuda), o Venus of the South Seas (1924), trató en vano de cruzar el Canal de la Mancha a nado hasta en tres ocasiones. Vegetariana convencida, escribió un curioso libro para niños titulado Cuentos de hadas en los mares del sur (1926).
28 En su edición del 17 de mayo de 1930.
29 Publicada en el diario La Voz el 25 de julio de 1930. Alberto Insúa la remata con juicios favorables (aunque no ditirámbicos) de Caminos, que le gusta «como la promesa de una obra más fuerte y personal». Y añade: «Desde luego, esta muchacha es poeta. Esencialmente poeta. Pero su don o fondo lírico no ha encontrado todavía un cauce original. Sus versos saben a otros versos. De vez en cuando surgen la metáfora virgen, la imagen nueva, el timbre de una voz no escuchada. Lo frecuente es una manera fácil, conocida, y un tono elegíaco de la más honda raíz romántica que no dan idea de la persona tan dinámica, tan actual que escribió los versos».